“El suplemento de fútbol tiene tal erudición que el que no sabe se queda afuera en la primera página. Sin embargo, es algo popular y uno puede hablar en esa jerga. Al suplemento de cultura siempre se le está pidiendo que hable para los que no le importa la cultura.”
Damián Tabarovsky
Thursday, December 31, 2009
No le importa
Tuesday, December 29, 2009
Saturday, December 26, 2009
Friday, December 25, 2009
Lado A y lado B
Hace un mes y medio leí "El otro lado" de Consiglio después de ver una reseña de Saítta en adn cultura. Ahí decía cosas como que el libro empezaba dos veces, primero con pequeñas historias de pequeños hombres, con una primera persona bastante marcada y la segunda parte relatos más largos donde Consiglio "suelta la mano". Ciertamente la segunda parte del libro parece casi justificar la lectura de esos primeros textos un poco sucios en sus historias y limpios en su fraseo. En la parte llamada "La verdad de los otros" la mirada se torna extraña, el silencio o lo no dicho invade los textos, cierto misterio infiltra tanto a las historias como a la frase que parece hamacarse.
Saítta dice que los textos de la segunda parte pueden ser leídos como variaciones de una frase dicha al principio: "Recordé un dicho de mi madre en el que se confundía enfermedad con violencia". Ambas partes del libro son casí como dos lados de un cassette. Lado A y lado B. En el A los clásicos, los textos que parecen inscribirse en una huella trabajada por los narradores del realismo sucio. En el lado B, como todos lados B, se inscriben las rarezas, algunos experimentos. El libro de Consiglio, una cassette entero.
Tuesday, December 22, 2009
Friday, December 18, 2009
Monday, December 14, 2009
Tuesday, December 01, 2009
Habló Aira
de los que no escriben:
"Lo que pasa es que hay muchas personas que, cuando dicen en su juventud "yo quiero ser escritor", en realidad lo que quieren es funcionar socialmente como escritores, eso es lo que les gusta. Tener el carné como para poder opinar, ir a congresos, tener una figura social profesional. Y encuentran que el problema que plantea eso es que tienen que escribir, cosa que no les gusta. Entonces escriben un libro cada diez años, con un gran esfuerzo, o recopilan artículos de manera que mantienen en vigencia su carné de escritor".
de los jóvenes, que por ser jóvenes, parece que no pueden ser escritores:
"Creo que la narrativa, en la Argentina por lo menos, ha caído en un realismo un poco chato, casi costumbrista, costumbrista tecno, pero costumbrista al fin. Hay una chatura tal (y me sucede con muchos jóvenes que se reclaman de mi influencia, de mí como modelo) que, cuando leo lo que escriben, me sorprendo. Ha quedado muy relegada la invención. Hay como más voluntad de testimonio, de estas vidas maravillosas que estamos llevando. Creo que la historia les ha jugado una mala pasada a los novelistas, y es que les ha solucionado muchos problemas. Y una novela sin conflicto... Estos jóvenes de clase media, que son los que escriben, los que van a la Facultad de Letras, hoy día ya no tienen ningún problema, la historia se encargó de solucionarles todo".
Acá
Tuesday, November 24, 2009
Peronismo y Literatura
Literatura sí, zapatillas también
La expresión "literatura peronista" tiene aires de oxímoron. Desde el slogan "Alpargatas sí, libros no" hasta las concepciones vertidas por Torcuato Di Tella, entonces secretario del área de Néstor Kirchner, el peronismo ha entendido a la cultura como algo más amplio que la actividad de las elites intelectuales y artísticas. Nadie cree ya que la cultura consista sólo en obras refinadas que embellecen las almas. Pero las prácticas de las clases intelectuales (suplementos "culturales", negocios académicos) no hacen otra cosa que reproducir la diferenciación social.
En estos largos años de gobiernos del partido único peronista, muchos jóvenes de clase media metieron las patas en las fuentes. Así como en los 70 el baño de pobreza de la juventud clasemediera incluía la colocación de bombas o el trabajo en villas, en tiempos de la democracia desencantada la ampliación de los sentidos se tradujo en excursiones de distinto tipo por los infiernos de la pobreza.
La literatura refleja sus condiciones de producción. Veinte años de gobiernos peronistas no pueden producir si no una literatura peronista. En muchos autores de las generaciones emergidas tras la dictadura se leen las tendencias internas del Movimiento: desde el peronismo de base con que Incardona retrata el conurbano posindustrial, hasta el entrismo vanguardista de Alejandro Rubio, que ejecuta desde el laboratorio formalista un peronismo de la torre de marfil.
Santiago Llach
Poeta y editor
Publicado en Ñ
Sunday, November 22, 2009
Sea feliz
El principio psicoactivo de la coca fue descubierto en 1859, mediante un procedimiento
que empleaba para la extracción alcohol, ácido sulfúrico, bicarbonato sódico y éter. Poco después
médicos y laboratorios recomiendan ya la cocaí na como “ buen alimento para los nervios” , para
combatir hábitos de alcohol, opio o morfina, e incluso conceder “ sempiterna vitalidad y
hermosura” a las damas. No se habí a conocido nunca una campaña promocional como la
orquestada por Merck, Parke Davis y otros fabricantes en todo el mundo; uno de los lemas
comerciales decí a: “ no pierda tiempo, sea feliz; si se siente pesimista, abatido, solicite cocaí na ".
Sacado de Aprendiendo de las drogas, Antonio Escohotado
Friday, November 20, 2009
Escritura y anécdota
Una escritura que es aun mejor que la novela. El modo de escribir, de activar ideas, de precisar detalles, de exponer paisajes supera la anécdota que cuenta la novela. Esto no quiere decir que la novela, la historia en sí misma, no sea sustanciosa. Por el contrario la escritura y el estilo de O. Coelho justifican su presencia y dejan en un segundo plano al tema al cual se refieren. Este distanciamiento de planos practicamente indivisbles hace de la novela algo mucho más poroso, algo que se puede leer en distintas capas.
Y acá el mismo Coelho cuenta su novela.
Wednesday, November 18, 2009
Para discutir un rato largo
¿Aira o Piglia?
Hace poco le pidieron a Tomas (34), director del suplemento cultural de Perfil, que dijera cuál era el novelista más importante de la literatura argentina actual. "¿César Aira? ¿Ricardo Piglia? Para mí, ese nombre tiene sólo un apellido: Fogwill". Salvaje y político, Fogwill (68) entró en la escena con el electrizante relato Muchacha punk (1979) y se sumó al bando de Aira (69).
sacado de acá
Friday, November 06, 2009
Formas de vida
Los grandes pensadores del marxismo lo señalaron en su momento con meridiana claridad: el proceso de transformación política de la sociedad no culmina sino al alcanzar los aspectos más comunes de la vida cotidiana de las personas. Por supuesto que hay revolución porque se toma el Estado o se liquida la propiedad privada de los medios de producción, porque se establece la reforma agraria o porque se procede a abolir la acción retardataria de las diversas iglesias; pero nada de eso alcanza a consumar una revolución cabal hasta que las prácticas diarias y los hábitos culturales más inmediatos se ven radicalmente transformados en el escenario común de la gente común.
Martín Kohan, acá
Escritura interior
Leí Cuestiones Interiores de Mempo Giardinelli. Un texto que funciona como una medicina que se aplica por dosis breves. La novela dividiva en capítulos muy cortos es ágil y dinámica, no por eso se lee rápido porque su escritura impone una atención más bien cercana a la poesía. Una novela breve y oral que mezcla discursos de distintas voces sin anuncio alguno, en la misma oración puede hablar el protagonista, llamado Juan, y su abogado y el narrador. Un registro saeriano en las comas, en el trabajo con la frase larga. Una novela muy hablada para adentro, muy pensada en voz alta, por sobre todo un texto suelto y liberado. Finalmente, un texto que parece ser la versión vernñacula de El extranjero de Camus.
Una novela menor
Leí La habitación cerrada de Paul Auster. Un texto menor. Un poco de intriga aquí, otro poco de realismo sucio allá. Reflexiones sin mayor grado de profundidad sobre la escritura y una obra literaria a la que no se accede como uno de los principales personajes. Apuesta a personajes fuertes. Algunos relatos incluidos que más que contribuir al sentido dilatan el texto hacia un final menos explosivo de lo que la novela insinua. Unas primeras páginas muy buenas que son lo mejor de la novela y luego quizás por tener que explicar algunas cosas se diluye el efecto.
Saturday, October 17, 2009
Friday, October 16, 2009
Sexo, Dinero y Política
En otro orden de cosas aparecen los grande temas que trabaja Fogwill. sexo, dinero y política. La novela estructurada en doce capítulos dada uno correspondiente a los años que van desde 1971 hasta 1982 trabajan la transformación, paulatina e inexorable, de un hombre que en las primeras páginas piensa en el retorno de Perón para luego ser un funcionario de lo que llama "contrarevolución". La novela es mejor idea que texto. Esa especie de mutación, de adaptación casi imperceptible por parte del personaje, lo convierte no sólo en otro sino también deja al descubierto el carácter pasivo y versátil del personaje para ser moldeado por la historia. La novela queda condensa en la siguiente frase: "siempre puede aparecer un plan capaz de cambiar el valor de cualquier cosa, incluyendo en de las personas". El final del texto es la parte más intensa en tanto se concreta la lucidez del narrador para cerrar la novela. Fogwill narra escenas de sexo y narra, lo que aun es más interesante, escenas de sexo imaginadas por el personaje. Fogwill habla de dinero, saca cuenta, convierte plata de una moneda a otra; el dinero es una dimensión constitutiva. Fogwill habla de política, mentira. Fogwill expone a sus personajes a cierta luz, a cierta pantalla histórica, que muestra lados que nunca se terminan de pronunciar. La politíca es más un terreno que un tema o se podría decir que Fogwill diluye el peso de un tema que puede polarizar la novela haciendolo el territorio y campo sobre el cual exponer a los personajes. Es raro el intento por escribir en pasado sobre la etapa 71/82 con rasgos de aquella actualidad. Si bien el texto nunca pretende situar los hechos en el presente si insiste una y otra vez con marcas de aquella actualidad. No es una novela que hable tanto del pasado como una novela que ubica al lector bajo las coordenadas ya vencidas de ese tiempo.
Thursday, October 08, 2009
Felisberto
Eterna Cadencia ha editado una selección importante de cuentos de Felisberto Hernández, acompañada por un pólogo de Elvio Gandolfo. Pareciera haber una relación, por otra parte bastante arbitraria, en la que libro y texto pueden encontrarse. Es decir, el objeto libro en tanto intervención digamos cultural y el objeto texto en tanto trabajo sobre el sentido. El libro viene a rescatar, a juntar, a precisamente reunir, aquello que faltaba y que no podía ser olvidar. Y ahí es el punto de contacto con los cuentos que están de algún modo definidos por la insistencia del recuerdo. Por las disgresiones del recuerdo, por materiales que aparecen ante el narrador sin saber muy bien por qué es que aparecen pero que no puede evitar. El libro reune y rescata cuentos que no debieran ser olvidados, justamente aquello que los textos no logran por insistencia de los recuerdos.
Monday, September 21, 2009
La vivienda del trabajador
El libro de Daniel G. Helder es un objeto raro, mezcla de ensayo con descripción densa y cierta escritura que pone en el centro el gesto poético. La escritura activa mecanismos de pensamiento, de narración, de descripción austera y minuciosa.
Monday, September 14, 2009
Dos cosas al mismo tiempo
“Eramos sólo nosotros tres. Yo tocaba la batería. Dee Dee tocaba la guitarra rítmica y hacía la voz solista. Cuando se ponía a cantar dejaba de tocar la guitarra, porque no podía hacer las dos cosas a la vez” (Joey Ramone).
Sunday, September 13, 2009
Al final el problema fue la guita
La banda que se arrogó el compromiso social y el no venderse nunca se disolvió por unos videitos, qué feo ¿dónde quedó el aguante?
El único Indio que vive en un country lo dice acá
Saturday, September 12, 2009
Información - Narración
Hay una tensión entre información y narración. Hay que distinguir la una de la otra. La información sería el modo en el que un sujeto conoce algo que no pertenece a su propia experiencia, mientras que la narración sería un conocimiento que el sujeto incorpora a su experiencia. La noción de experiencia es clave para definir el concepto de narración, pero la información –sobre todo la información contemporánea- pone al sujeto de una situación casi de afasia.
Ricardo Piglia, acá
Thursday, September 10, 2009
Friday, September 04, 2009
Wednesday, September 02, 2009
Punk: la estética del rechazo
(Mark Perry, Sniffin´ Glue n. 7, Febrero 1977)
Sunday, August 30, 2009
Una vieja encuensta
Damián Tabarovsky
(...)Entrando en la Encuesta, hay un punto que llama la atención: es maravilloso ver a Sabato y a Borges trabajar profesionalmente para ser Sabato y Borges. De tan estereotipados terminan dando ternura. Por ejemplo, en el caso del sabio de Santos Lugares, antes de responder la primera pregunta, agrega una nota introductoria (dedicada a “SZ”, seguramente Susana Zanetti, a cargo de la dirección del proyecto) donde escribe: “Abrumado de problemas (sic), le respondo el cuestionario”. Como una caricatura de sí mismo, parece un chiste que lo primero que exprese sea su estar abrumado (a lo que se le podría agregar todos los sinónimos posibles: agobiado, atosigado, etcétera). ¡Cuánto sufrimiento! Y más adelante, ante la pregunta por cómo empezó a escribir, señala: “Como se sabe, estudié ciencias físico-matemáticas”. ¿Pero quién lo sabe? O mejor dicho, ¿quién no lo sabe? Sabato no concibe que no haya alguien que no conozca su vida (su biografía) y, como se sabe, tiene razón, todos la conocemos (en el mismo tono señala: “Mi primer libro fue publicado en 1944, cuando hice público (sic) mi alejamiento definitivo (sic) de la ciencia”). Borges es interrogado por Noemí Ulla. Aquí también el comienzo marca el tono de la entrevista. El reportaje empieza con una duda: “Borges, ¿quiere que lea todas las pregunta?” (me alarma el uso de ese “Borges”. A Cortázar, por ejemplo, nadie le decía: “Cortazar, ¿cómo escribe?”. Ese “Borges” funciona en la pregunta complaciente sólo como una mala cita al lugar común del borgeanismo). A lo que un Jorge Luis, entre dubitativo y seguro, responde: “No, no (sic). ¿Cuántas son?”. Entonces Ulla le informa: “Son nueve”. Y el maestro, aliviado, remata: “Está bien, es una cifra mágica (sic)”. Al fin y al cabo, la sacamos barata: podría haber dicho “cabalística”, pero en ese caso los números deberían ser el 3 o el 7, creo. (...)
leela completa acá
Friday, August 28, 2009
Friday, August 21, 2009
Bochatón en Le Bar
Bochatón toca en el precioso e intimista Le Bar
Sábado 22 de agosto, Le Bar, Tucumán 422 (Buenos Aires), a las 21:30 hs. (¡puntual!).
Entradas muy limitadas a $30.
Monday, August 17, 2009
Cómo volver
Este fin de semana largo volví, de modo repentino y breve, a Borges y a Cortázar. Abandonados hace más tiempo del que creía, fui por el Informe de Brodie y Octaedro, dos de los libros que me quedaron pendientes cuando me saturé de leer a Borges y Cortázar. Al Informe de Brodie entré sin problemas, con un horizonte claro de lectura, mirando algunas capas de la escritura de Borges que no recordaba o que no había leído antes, igual los cuentos, salvo El evangelio según Marcos y La intrusa, no me cegaron de lucidez, sino, más bien, variaciones de algunos lugares un poco comunes pero no por ello menos intersantes de Borges. En el caso de Octaedro leí la primera página y no pude seguir, cómo si estuviera leyendo por vez número mil una página que ya no me seducía. Entonces, pasé a "Ahí pero dónde, cómo", un cuento de la mitad del libro que siempre me había interesado y después de leer tres páginas salí del libro y lo dejé. Cómo volver, con que expectativas, con que horizonte de lectua, ese es el tema. ¿es necesario volver en todos los casos? ¿Hay que volver en forma de relectura o a algo no leído de un autor ya leído? La experiencia de la vuelta, del retorno, tiene siempre algo de inestabilidad, de desconcierto entre el recuerdo y lo percibido en ese momento, esa diferencia, ese default es lo que hace interesante la experiencia de volver.
Friday, August 14, 2009
Primero y después
Primero es así:
"El momento más feliz es cuando llegas a casay me besas y hablamosde todas las cosas que van a pasar.El momento más feliz es cuando tarde, en la cama,yo te abrazo y tú susurrasque quieres quedarte por siempre jamás"
La casa azul
y después es así:
"Sólo me queda un amor que jamás cuestionaréQuién he sido y quién soyAunque me aburre saber que siempre lo tendréY que es el mejor"
Toto
Carrera
Wednesday, August 12, 2009
Pastillas para no dormir
Hoy quiero una fiesta de mínimos toques de eternidad y de pastillas para no dormir
Tuesday, August 11, 2009
Friday, August 07, 2009
Matthias Stimmberg
Monday, August 03, 2009
Thursday, July 30, 2009
Wednesday, July 29, 2009
Escrito en un pliegue
Una narración ubicada bajo la zona de influencia Saer, que logra definir una voz propia.
Novela escrita en el pliegue de otra narración, en el lugar en que una historia deja un hueco, un secreto, donde se desvía y deja algo oculto se desarrolla el texto. Glaxo es una narración que viene a dar cuenta de ese punto ciego, de ese lugar plegado de otra narración.
Escrito bajo el signo de la calma y el rumor de un pueblo de provincia, con la pausa y la precisión poética necesaria para entrar en el mundo Glaxo.
Sunday, July 26, 2009
Schanton
Barthes parece estar reflejando este momento de hiperinflación de data y “discurso cultural” cuando anota “El mundo nos obliga a ‘interesarnos’ por todo: prohibición del desinterés aunque sea provisorio”. Y concluye: “Cuanto más crece la información, más retrocede el conocimiento”.
leer completo acá
Salgamos lejos
Canción llévame lejos
donde nadie se acuerde de mi
quiero ser el murmullo de alguna ciudad
que no sepa quien soy
+
salgamos a caminar
yo conozco un bar en la estación
salgamos sin querer volver
que ya extraño aquella sensación
cuando pasaban las horas, las horas, las horas así
Thursday, July 23, 2009
Porcelana y volcán
«Evidentemente, toda vida es un proceso de demolición.»1 Pocas frases resuenan tanto
en nuestra cabeza con este ruido de martillo. Pocos textos tienen este irremediable
carácter de obra maestra, y de imponer silencio, de forzar un asentimiento aterrado, como
la novela corta de Fitzgerald. Toda la obra de Fitzgerald es un único desarrollo de esta
proposición, y sobre todo de su «es evidente». Un hombre y una mujer, unas parejas
(¿por qué unas parejas sino porque se trata ya de un movimiento, de un proceso definido
como el de la díada?) que lo tienen todo para ser felices, como suele decirse: bellos,
encantadores, ricos, superficiales y llenos de talento. Y luego, algo sucede que hace que
se rompan, exactamente como un plato o un vaso. Terrible mano a mano de la
esquizofrénica y el alcohólico, a menos que la muerte no se los lleve a los dos. ¿Acaso es
esto la famosa autodestrucción? ¿Qué pasó exactamente? No intentaron nada especial
que estuviera por encima de sus fuerzas; y sin embargo, se despiertan como tras una
batalla demasiado grande para ellos, el cuerpo roto, los músculos agarrotados, el alma
muerta: «Tenía la impresión de estar de pie en el crepúsculo en un campo de tiro
abandonado, con un fusil vacío en la mano y las dianas derribadas. Ningún problema que
resolver, simplemente el silencio y el solo ruido de mi respiración... La inmolación de mí
mismo era un cohete sombrío y mojado.» Por supuesto que sucedieron muchas cosas,
tanto en el exterior como en el interior: la guerra, la quiebra financiera, un cierto
envejecimiento, la depresión, la enfermedad, la pérdida del talento. Pero todos estos
accidentes ruidosos ya produjeron sus efectos en su momento; y no serían suficientes por
sí mismos si no socavaran, si no profundizaran algo de toda otra naturaleza y que, por el
contrario, no ha sido puesto de manifiesto por ellos sino a distancia y cuando ya es
demasiado tarde: la grieta silenciosa. «¿Por qué hemos perdido la paz, el amor, la salud,
una cosa tras otra?»
G. Deleuze
Saturday, July 04, 2009
Friday, July 03, 2009
Wednesday, June 24, 2009
El árbol de Libertella
En el Árbol de Saussure, Héctor Libertella construye fragmentariamente un objeto que implosiona la literatura. Raro ensayo sobre el lugar de la literatura, o del arte, en el futuro, como dice la bajada del título: una utopía. Libertella hace un relato lleno de agujeros, de escenas sobre las que vuelve para retormar ideas que se disparan en direcciones diversas para juntarse en el final en un mismo punto. Libertella propone, entre líneas, nunca de manera explicíta, una literatura que sea el eco de aquello que no sucederá. El libro es opaco, se hace ilegible porque satura de ideas, de bocetos de ideas, de epílogos de ideas de otros. El Árbol de Saussure parece ser una bomba que genera la resonancia de la próxima literatura.
Sunday, June 21, 2009
Saturday, June 20, 2009
Voz
La voz del poeta no debe ser solamente el recuerdo del hombre, también puede ser su sostén, el pilar que lo ayude a resistir y a prevalecer.
W. Faulkner
Monday, June 15, 2009
Curador
El don de la anacronía
Hace poco, en Argentina una ola de nuevos narradores y otros no tan nuevos involuntariamente les concedió a algunos críticos la oportunidad de actualizar sus discusiones. De la mano de una narrativa influenciada por Internet, los blogs, la crónica, la fusión de géneros se acuñó el concepto sofisticado de literaturas "posautónomas". Según este concepto, la literatura podría no regirse ya por sus leyes internas, estaría perdiendo autorreferencialidad y podría obedecer a nuevos criterios de valoración para adecuarse al presente. Rápidamente, superada por el vértigo mediático, la novedad fue desplazada por una tendencia asociada a la anterior: una presunta literatura del yo.
Curiosamente, esas categorías en juego pasaron a ocupar en varios suplementos culturales el lugar efímero de la noticia, como en otro momento el rótulo de literatura femenina. Esta vez la invención no fue una estrategia de marketing editorial, sino un rapto de sofisticación intelectual. Algo parecía mudar de piel: no la literatura sino la crítica, que abandonaba criterios intrínsecos de valoración -estilo, calidad literaria, etcétera-, y con una terminología extraída de los más recientes estudios culturales intentaba abordar textos híbridos que hablaran la lengua del presente.
Lo cierto es que textos que fuerzan categorías distintas de análisis existen desde hace tiempo -los precursores de la poesía concreta, de la poesía visual, sin ir más lejos, o escritores como Puig, Copi y Aira-. Lo interesante del caso es que la figura del crítico literario, bajo esta innovación, se superpone a la del crítico de arte, ese agente externo a la obra que dirime criterios de valoración circunstanciales. Es un rasgo que puede verificarse a nivel global: el crítico literario en el rol de curador.
No estoy seguro de que en la literatura estas reglas de prestidigitación sean tan efectivas como en el arte contemporáneo. La operación de este tipo de crítico consistiría en fundar la ilusión de movimiento y verdad donde hay contingencia. Aunque es válido, esta operación soslaya que el lector todavía sigue regido por una autonomía temporal y una historia privada que forma su gusto, y que probablemente acuda a un libro no para encontrar retazos de lenguajes mediáticos y actuales, sino para desalienarse de ese imaginario público y pasar a una dimensión en que las palabras significan y resuenan de modo diferente.
Oliverio Coelho. en El paísSaturday, June 13, 2009
Friday, June 12, 2009
Sunday, June 07, 2009
Duchamp
En enero fui a ver la muestra de Duchamp en Proa, desde entonces quiero escribir algo al respecto pero hasta ahora no pude. Hace un par de días me econtré con un texto de Alan Pauls que habla de Duchamp. La nota publicada en Página 12 tiene exactamente diez años, está escrita al momento de la aparición de una biografía sobre Duchamp. En esa nota Pauls dice todo lo que yo queria decir, da forma a lo que yo no podía y, además, agrega otras capas de sentido. Más abajo un fragmento de la nota.
Ese índice apuntado a un objeto común, indiferente, sin “gusto”, ese eso –-algo tan simple y económico como un eso, que con recursos mínimos consigue efectos máximos, ¿no es lo que en ajedrez se llama elegancia?– es lo que hizo famoso a Duchamp. Famoso y, para provecho de Tomkins, que aquí libra su propia batalla de biógrafo norteamericano, ininterpretable. Porque ésa es la otra tensión que envalentona a este libro sabroso, inteligente, que ya sería irresistible si se limitara a comentar, en cinco o seis renglones distraídos, la vida de cualquiera de sus personajes secundarios (Picasso, Peggy Guggenheim, Man Ray, Katherine Dreier, Henri Pierre Roché, amigo del alma, socio en un par de suculentos ménages-à–trois y autor del slogan que mejor define a Duchamp: “Su obra más imponente es el empleo del tiempo”): la guerra contra la interpretación. Retomando una vieja fobia de Nabokov (asimilar toda interpretación a una “patraña freudiana”), y también sus armas (la mordacidad, el sarcasmo, risitas malévolas), Tomkins parece sostener que eso –el gesto fundador de Duchamp– no tiene sentido, que es sólo un indicador, un signo que muestra algo –un mingitorio, una pala para nieve, un rascacielos de 241 metros de altura– que es opaco, impasible, pura superficie. Como el dandy Duchamp.
Pero, ¿y si aun en esa apoteosis de la frivolidad hubiera algo más? ¿Algo menos? ¿Un resto? Medio siglo después del Caso Mutt, Duchamp, en una entrevista con Francis Steegmuller, volvía a darlo vuelta todo. “Usted sabe que es uno de los artistas más famosos del mundo”, le comenta Steegmuller. Y Duchamp: “No sé nada de eso. En primer lugar, la gente común no conoce mi nombre, mientras que la mayoría ha oído hablar de Dalí y de Picasso, e incluso de Matisse. En segundo lugar, si alguien es famoso, creo que es imposible que lo sepa. Ser famoso es como estar muerto: no creo que los muertos sepan que están muertos. Y en tercer lugar, si fuera famoso, no podría enorgullecerme demasiado; la mía sería una fama payasesca, que se remontaría a la sensación causada por el Desnudo bajando una escalera. Aunque supongo, evidentemente, que si esa clase de infamia dura ya cincuenta años, es porque entonces hay algo más que el escándalo”. Steegmuller: “¿Qué otra cosa hay?”. Duchamp: “Hay eso”. “¿Eso?” “Eso. Lo que no tiene nombre.”
leanla completa acáThursday, June 04, 2009
Diagnóstico
“la vida continuaba, por dañada que estuviera”.
Gunter Grass, Cómo esribir después de Auschwitz
+
“Si algo está enfermo, está con vida”.
Soda Stereo, Terapia de amor intensiva
Tuesday, June 02, 2009
Vomitar
Tengo ganas de vomitar, de vomitarme a mí…
Tanta es mi nausea que si pudiera comerme el universo
Para vomitarlo después en la letrina, me lo comería.
Fernando Pessoa
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Me gustaría ser antropófago, no para comer un hombre
Sino para poder vomitarlo.
Emil Cioran
Monday, June 01, 2009
"¿Me ayudás?"
Se acuerdan cuando existía el rock argentino? Qué épocas aquellas, marcadas por algunos hitos inolvidables: el apoyo a la guerra de Malvinas, el coqueteo de varios rockeros con Viola, Charly García haciendo campaña por Angeloz y Menem, Spinetta pidiendo mano dura. Ahora hay una letra de una canción que por su hondura y contundencia bien podría ser de Calamaro o Fito Páez: “Si me ayudás,/ podemos cambiar todo lo que nos hace mal/por todo lo que nos hace bien”. Ah, perdón: me dice Guillermo Piro, sentado aquí a mi derecha, que no es una letra de rock sino una frase de una publicidad de De Narváez. Es cierto, levanto la vista y en el televisor –en todas las redacciones hay televisores– se ve un aviso del candidato empresario donde se escucha la sentencia en cuestión. ¡Qué profunda! ¡Por eso me la confundí con una canción del rock argentino! En su columna en Los Inrockuptibles (inteligente y bien escrita como de costumbre), Juan José Becerra echa una aguda mirada sobre el candidato empresario, y al comentar otro de sus eslóganes (“La seguridad se hace”) propone reemplazarlo por “Facho se nace”.
Damián Tabarovsky, acá
Friday, May 29, 2009
Thursday, May 21, 2009
La escritura fantasma de Bellatin
Los fantasmas del masajista de Mario Bellatin es una inyección de desconcierto. La novela se abre y se dispersa, pone a prueba la resistencia de la narración y se cierra conjugando todas las líneas. Bellatin aplica con su novela breve, de una única dosis, un efecto minimalista y desestabilizador. Una novela rápida, que fluye, una novela tan suelta como obsesiva, narrada con el registro del resumen y la síntesis y con la precisión de la poesía. Los fantasmas del masajista no tiene ningún punto aparte, escrita para ser leída sin interrupciones, sin salirse de la atmosfera intima y extraña que genera el texto. Cuando termina la escritura no termina la novela porque se inicia una especie de epílogo y resumen formado con fotos que vienen no solo a repetir la historia sino también a distorsionarla poniéndole imagen a las palabras. La escritura queda concentrada en un puñado de imágenes que muestra inútil y banal la escritura anterior que solamente glosa las imágenes que conocemos solo una vez que leímos su narración. Al mismo tiempo, el montaje de escritura en una dosis tan ligera como densa y las fotos del final configuran una disposición de elementos que impostan mostrar todo y solo son un modo de ocultamiento, de escamotear un sentido último que quedó desgarbado en el proceso de escritura.
Wednesday, May 20, 2009
Sunday, May 17, 2009
Concierto
A partir de Infame y de cierta masificación de su música, Babasónicos tiene por resolver una coyuntura: cómo seguir. Claro que después de Infame vinieron otros dos discos, Anoche y Mucho. El primero un disco corto, que trabaja sobre un par de ideas y las explota. Anoche se repliega sobre el formato canción para trabajarla, la máxima expresión es el increíble trío Carismático-Yegua-Flash que comparte estribillo y patrones musicales haciendo una única canción de nueve minutos integrada por tres partes tranquilamente separables. Luego, con el ya no tan reciente Mucho, las ideas de Anoche se potencian y sintetizan. En busca de una canción “redonda” hacen un disco breve que explora sus ideas en cada canción de modo rápido, canciones que se auto-consumen en la explosión de lo que tienen para ofrecer. Escamas, Cómo eran las cosas y Pijamas los puntos más altos de canciones invencibles. Anexo aparte para Microdancing, muestra perfecta del estilo babasónico-moderno. Ahora, el talento y la destreza de Babasónicos les permite realizar discos muy buenos pero que no logran resolver la coyuntura sobre cómo seguir luego de ser tomados por la industria cultural. Es decir, cómo mantener ese carácter un tanto hiriente que define al rock, esa constante de cambio, de imposibilidad de sistematizarlo. Hoy Babasónicos incomoda o lastima de un modo tan indirecto y solapado que pasa desapercibido.
Ayer vi a Babasónicos y el recital no lastimaba a nadie, sonaron muy bien y ya a esta altura cuentan con una batería de temas tan notables que cualquier lista que armen va a estar más o menos bien. Ayer, la gente estaba con los cochecitos de sus bebés, se sacaba fotos con cámaras digítales, las adolescentes gritaban de manera histérica, muchos se paseaban como quien va a un lugar para después contarlo.
“El rock es eso que no sabes donde ponerlo y que te deja en una actitud de desconcierto. A mí me gustan los desconciertos de rock más que los conciertos”. Daniel Melero
Babasónicos ayer dio un concierto.
Monday, May 11, 2009
Friday, May 08, 2009
Drogi danzer
Victoria Mil
+
Entonces, drogas... ¿para qué?
Babasónicos
Wednesday, May 06, 2009
Firma
“Si el autor, de aquel dios que era, deviene a esta altura un difunto, ¿quién escribe ahora los poemas? Es un serio problema, se escribe precisamente para intentar descubrirlo, para obtener del texto su remitente, para derivar del gesto de su emisor”. Valerio Magrelli. Repito, obtener del texto su remitente; me acuerdo de una frase semiótica que dice algo así: estudiamos productos para reponer procesos. Se escribe para obtener el remitente, para saber de qué se es capaz, o simplemente, qué se es. Algo me hace ruido. Una construcción de la identidad, o mejor aun, una huella de la identidad. Repito, para derivar del gesto de su emisor; y dijo emisor y no narrador, y dijo emisor y no enunciador, y dijo emisor y no autor. Gesto y remitente. El texto se firma a sí mismo.
Monday, May 04, 2009
Crudo
El lunes pasado vi la obra de teatro "Crudo", actuada y basada en la vida de Jose Maria Muscari. Los problemas para pensar la obra es que es una obra sobre Muscari ("esto no es ficcíon ¿te animás a verlo todo?" reza la bajada de los afiches) pero que no es de Muscari. Es decir, la dirección y los textos son de Mariela Asensio, quien hace esta obra sobre, como se anuncia, "su mejor amigo". La obra es dinámica, muy dinámica. El escenario es el teritorio vital de Muscari, ahí cocina, habla por teléfono en vivo, se cambia de ropa, hace gimnasia, chequea mails y baila. En lo dinámico de la experiencia radica el poder de la obra, en ese movimiento continuo y en un Muscari que no actúa, tan solo habla de su vida a través de un guión pero tranquilamente podría estar improvisando. Muscari se emociona, pide perdón, habla de sus conflictos, de su fascinación por los fisicoculturistas, de sus proyectos, de sus parejas, de su familia (la del pasado y la piensa para el futuro), se da por completo. Se muestra Crudo. Muestra las costuras de su vida. La obra está sostenida en la figura temática y actoral de Muscari y en un uso muy acertado del video. Muscari actúa delante de una pantalla que muestra fotos y video-cplis, la imagen visual organiza la obra, la divide en capítulos y es el telón de fondo, el paisaje, el cielo, sobre el cual interactua Muscari y sus tres acólitos femeninos. La obra apela a lugares comunes para transformarlos, para adulterarlos y que ya no se sientan tan comunes. Escribe Muscari en el blog de Crudo: "le regale flores y ella fue feliz a veces la simpleza es compleja de encontrar". Ese parece ser el recorrido que toma la obra, es decir, el Muscari vital y actor que se deja dirigir por otro.
Tuesday, April 28, 2009
Saturday, April 25, 2009
Sábado pop
Sábado a la noche, otra vez,
solo y confundido te llamé,
escuché tu voz lejana
y en silencio te corté.
Juana la loca
+
sábado, la noche sábado
escribe el día
su canción de sábado
no te espero en ninguna parte
ya no tengo a qué amarrarte.
Bochatón
+
Este sábado a la noche te paso a buscar
a bailar el Wadu-Wadu que te va a gustar
te prometo invitarte muchas veces más
todo el tiempo Wadu-Wadu para re-relajar.
Virus
Friday, April 24, 2009
Pac Man
"Los videojuegos no tienen ninguna influencia sobre los niños. Quiero decir, si el Pac-Man hubiera influenciado a nuestra generación, estaríamos todos corriendo en salas oscuras, masticando píldoras mágicas y escuchando músicas electrónicas repetitivas".
Monday, April 20, 2009
No son escritores
En una reciente entrevista el español José Antonio Millán habló de "ficciones interactivas", algo así como una literatura interactiva, hipertextual y que se nutre de la incorporación de nuevos medios y lenguajes. En este sentido se debería dejar de hablar de literatura. El mismo Millán dice que se va hacia géneros híbridos que todavía no están del todo definidos, lo cierto es que de literatura parece haber poco, solo cierto nivel del relato y la narración. De igual manera, estas ficciones interactivas que utilizan, por ejemplo, Google Maps, tiene tantos puntos de contacto con la literatura como con el cine, es decir, muy pocos, casi nulos. Si bien el mismo Millán dice que estos productores de ficciones interactivas dejaran de llamarse escritores, aun, sitúa este nuevo género dentro de la literatura, o al menos, modificando la literatura. Al no haber un trabajo específico con el lenguaje verbal y a través del cual se defina el carácter de la disciplina, no se puede hablar de literatura. Sino, más bien, de nuevos modos de ese amplio y atractivo campo (dónde todo se cruza y se combina, ¿una especie de arte total?) de las artes visuales.
Friday, April 17, 2009
Porno
A partir de la lectura de Porno de Marcos Bertorello me interesa poder pensar dos puntos; primero el titulo, el titulo y la relación con los cuentos, si el titulo de un libro es, en definitiva, un horizonte de expectativas, si un titulo funciona al igual que funciona un nombre o si por el contrario se acerca a un rótulo. El otro punto que me interesa es pensar una definición de lo “porno” porque si consideramos que el libro de Bertorello trabaja sobre ese tema, se podría decir que pone, al menos, en crisis el término.
Los ocho cuentos parecen ser variantes de una idea inicial, como una serie que trabaja sobre los temas y las formas que se quieren cruzar. Entonces, el libro se podría agotar rápido. Tal vez “Cura” sea el cuento más logrado en cruzar las variables que atraviesan y se repiten en el libro: diálogos interrumpidos y superpuestos, montaje de niveles temporales y escenas que oscilan en el erotismo. Tío, que es el primer cuento, es el único que se aleja de esta tesis sobre la que está escrito el libro. Tío apuesta a la tensión narrativa y a lo no dicho. Maximiliano Tomas escribe en Perfil sobre el libro de cuentos de Bertorello: “en las páginas de Porno (evidentemente el malentendido lo genera el título, cerrado y concreto) hay más diálogo con el psicoanálisis, la crítica, el ámbito universitario y la tradición literaria que con la industria pornográfica.” Es cierto, por eso una de las claves de lectura del libro es el titulo. “Porno”, resulta desconcertante, en un sentido resulta incoherente. Algunos de los cuentos, incluso, parecen tener incrustadas escenas eróticas de modo casi injustificado. Así y todo, con estas escenas injustificadas que son propias del porno, el libro sigue haciendo ruido porque terminan quedando en un segundo plano, siempre se habla de otra cosa. El porno no es la excusa para hablar de nada, todo tema o especulación es buena excusa para la pornografía. Al mismo tiempo que el libro se llama “Porno” y entonces se evoca, se convoca un mundo de sentido, el titulo funciona como un rótulo y ya no un nombre porque el porno es un género y cómo tal promete un horizonte de expectativas, que no cumple. Porque, y acá está el segundo punto, el libro carece de lo “inverosímil” que define a la pornografía. Es decir, el porno es el lugar donde todo puede suceder y donde todo se va a ver y donde a todo se lo va a llamar por su nombre. El poder de las situaciones que se ven en cualquier película porno radica en que no es verosímil lo que ocurre pero nadie deja de mirar porque en el porno, más que el cualquier otro género, la anécdota no interesa. Una película porno toma cualquier elemento narrativo como mero pretexto o excusa para llegar a eso que es lo que se promete: cuerpos absolutamente desnudos, garchando sin limites. En “Porno” esto no sucede, tanto los narradores como los hábiles conversadores que discurren por todo el libro, se cuidan de no decir nada “chocante”, de “mal gusto”, no hay “malas palabras”, no corre el riesgo de desagradar que es el principal riesgo que asume el porno.
Monday, April 13, 2009
Tuesday, April 07, 2009
Gafas
Extravié los anteojos de aumento. Los tenia guardados en el estuche de un viejo par de anteojos de sol. Tengo la percepción distorcionada. Tan distorcionada que escribo (y pienso) sin comas.
Sunday, April 05, 2009
Tuesday, March 31, 2009
Sobra
"La poesía es impune, y sobra". Oscar Steimberg en Posible patria y otros versos. Repito la cita y cambio una palabra: "la literatura es impune, y sobra". No tiene castigo, está demás.
Thursday, March 26, 2009
La intemperie
Hace poco leí La Intemperie de Gabriela Massuh, un libro del que no puedo decir mucho, solo puedo hacer un intento ver todas las capas que tiene la novela: un diario que combina los niveles de vida privada y pública desde la óptica de la intimidad y desde el registro del diario personal. Novela que es un territorio liberado para incluir citas de otros, para que sea un diario de lecturas, para que sea una libreta de apuntes sobre la sociedad, ensayos a medio terminar o estado de germinación, espacio donde narrar (para exhibir y entender) las peripecias personales, un borrador de proyectos laborales, una libreta de viaje, el registro de las experiencias nuevas e inciertas y el lugar donde evocar otros tiempos.
Una novela urgente y espesa que se pregunta si se puede volver del arte vaciado y, por suerte, no responde con otra cosa que un objeto desconcertante.
Monday, March 23, 2009
La misma música
“La música funciona como el modelo más perfecto. Porque no parece tener referentes, porque parece funcionar con puras formas. Pero a mí lo que me resulta interesante pensar es que en la literatura se usa el mismo material que en la vida cotidiana. Y uno piensa: qué bueno sería trabajar con un lenguaje diferente. Se aspira a eso.”
Ricardo Piglia, acá
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(...) todas las artes aspiran a la condición de la música, que no es otra cosa que forma.
La música, los estados de la felicidad, la mitología, las caras trabajadas por el tiempo, ciertos crepúsculos y ciertos lugares, quieren decirnos algo, o algo dijeron que no hubiéramos debido perder, o están por decir algo; esta inminencia de una revelación, que no se produce, es, quizá, el hecho estético.
Jorge Luis Borges, acá